Según Science Direct» una deficiencia en el descanso durante el embarazo aumenta el riesgo de sufrir diabetes gestacional. Además, según un estudio publicado por la Sleep Medicine Review las embarazadas que tienen problemas para dormir o que padecen trastornos del sueño durante el primer y tercer trimestre, tienen mayores probabilidades de tener un parto prematuro.
Uno de los cambios que puedes notar desde los primeros meses de gestación son las variaciones en el sueño y descanso. Por ejemplo, al principio es normal sentirte constantemente somnolienta (y que te quedes dormida en cualquier momento y lugar). Esto sucede porque la hormona progesterona aumenta sus niveles durante esta etapa y produce un efecto sedante sobre tu cerebro.
Sin embargo, conforme avanza la gestación, y sobre todo a partir del tercer trimestre, aunque te sigas sintiendo cansada, es probable que te empiece a costar conciliar el sueño e incluso es posible que sufras insomnio.