El sueño reparador también desempeña un papel vital en la regulación del estado de ánimo y el bienestar emocional. Durante el sueño profundo, el cerebro procesa las emociones y los recuerdos del día, lo que nos ayuda a enfrentar el estrés y las tensiones de la vida diaria de manera más efectiva.
Además, nuestros órganos, para mantener su buen funcionamiento a lo largo de los años, pasan por un proceso de regeneración o desintoxicación mientras estamos durmiendo.
Recárgate con un sueño reparador